miércoles, 10 de junio de 2009

Lágrimas



Una llamada en la mañana, me dejo descompuesto emocionalmente, habia venido de una salida con unos amigos a una discoteca de ambiente muy reconocida en Lima, esperando esa llamada que recibia en la medianoche que hoy seria tarde, pero que me mantuvo despierto e intraquilo toda la madrugada, hasta que culmino a las ocho, tras las quejas de mi mamá que corte, mientras en me duchaba, derramé algunas lágrimas, que se fueron por el desague, me vesti, tome mis cosas y enrumbe al trabajo, mientras dormi el sueño que no pude tener en caso, pasaron algunas escenas anecdoticas que hicieron que el viaje fuera diferente, por ejemplo el carro tuvo accidente, lo que hizo que además el viaje fuera un poco mas prolongado que lo acostumbrado, un vendedor de caramelos, subio dos veces al carro, no se percato que ya habia subido antes, solte una carcajada de esas que tenia guardadas de hace tiempo, pero el final del viaje fue lo peor, antes de llegar a mi destino, soltaron un salsa de Willie Colon, cuyo título es “Simon, el gran varon”, no pude contenerme más y solte las lágrimas, lágrimas que tenía guardadas de mucho tiempo, refugiadas, escondidas, que esperaban el momento de quebrarme, para salir, lágrimas que liberaban de dolor, de resentimiento de antaño, me recordaban mi condición sexual, frágil, humana y mortal, me recordaban mi miedo a la soledad, ahora que estoy más tranquilo, creo que fueron liberadoras y sanadoras, aquellas lágrimas que pense terroristas.

Ahora he pensado mucho en como me relaciono con los varones, es una relación algo complicado, de pequeño fui siempre fui egoísta con mis amigos, fui celoso y posesivo, cuando iba descubriendo mi sexualidad, me entregaba facilmente, pero nunca comprendi el sentido de la intimidad, que lo había tenido con mi madre, con mi hermana, hasta con amigas, sin haber tenido contacto sexual, confundía el tema del sexo, intimidad y hasta el amor, lo reducía a terminos fisicos y carnales, me desvalorize, en cada encuentro, me sentía pésimo después, me sentía mas solo que nunca, me sentía menos yo, eran otros a través de mi, otros cuerpos, otros olores, otras sensaciones, deje de ser yo, para ser ellos dentro de mi, me odie tanto a mi mismo, por lo ocurrido, en recien me di cuenta de lo poco que me amaba, ahora viendo cuanto camino recorrido, no me siento mal, despues de todo, hice todo cuanto podía.